Hace unos días saltaron las alarmas, de nuevo, por un tema delicado relacionado con la salud en el CEIP Jocelyn Bell. Desconocemos las causas reales de ese incidente dentro del colegio, por que es un tema que hay que llevar con total privacidad y cautela. Sobre todo cuando hay niños y niñas implicados. Ese es un asunto que deben llevar únicamente las familias y el equipo docente competente del colegio.

Lo que desató la alarma es el rumor que comenzó a crecer de que dicha cuestión de salud partía y tenía su origen desde la colonia de gatos comunitarios que se aloja cerca del colegio. Muchos padres y madres recibieron la desinformación. Bien a través de audios en los grupos que comparten con los progenitores de sus vástagos, o bien por el medio más común y antiguo por el que se propagan los rumores, el boca a boca. Y, con la misma velocidad y crecimiento que si de un incendio se tratara, el rumor fue creciendo, haciéndose bola y adquiriendo no ya un tono informativo, si no más bien incendiario, enfocado en buscar un culpable inmediato y directo sin tener ningún tipo de argumento, ni prueba válida, ni certificación segura de que la causa sea esa. Solo es dejarse llevar por quien apunta a una dirección y ya.

La cuestión empeora, cuando más adelante, y sin ningún tipo de pudor, ni rigor, ni fundamento, estos rumores se publican en medios que juegan a ser periodistas y que se dedican solo a servir de plataforma de cualquier bisbiseo de calle y mentidero con tal de ponerse la vitola de que han sido los más rápidos en dar la información. Rápidos si, pero certeros no. Con un par de párrafos, malcopiados de la wikipedia a modo informativo sobre cuestiones de salud y enfermedades,  y sin contrastar ni informase de nada que pueda validar los comunicados que dan, sueltan sus cuentos y milongas amparándose en que transmiten solo palabras de terceros. Vamos, que es lo mismo que hacer de cotilla y malmetedor en la calle, pero ampliando su zona de expansión en las redes y web en general.

Mayor gravedad alcanza el asunto, cuando viene un nuevo audio, que las familias pudieron escuchar a través de sus grupos, en los que se asegura que el Concejal de Sanidad de nuestro Ayuntamiento va prodigando por todos lados que la causa del problema de salud del colegio es causa directa de la colonia felina. Y que, si bien es intención del equipo de gobierno llevarse dicha colonia de allí, se atreve a sentenciar que es la Asociación Quiéreme Mucho Valdeluz la que no les deja hacerlo. Atentos… No les deja, como si dicha asociación tuviera mando sobre el Ayuntamiento… Repetimos… No les deja. Pocas veces se ha visto de forma tan directa la incompetencia reflejada en excusas derivadas por la ignorancia.

Pocas veces se ha visto de forma tan directa la incompetencia reflejada en excusas derivadas por la ignorancia.

Se podría gritar muy alto y recordarles a nuestros concejales y alcalde que las responsabilidades y competencias últimas de hacer algo con las colonias felinas del municipio son del Ayuntamiento. Se les podría decir que la Asociación de animales está compuesta por voluntarios que usan su tiempo personal y realizan una tarea que debería, al menos, estar tutelada por el consistorio. Tal y como se hacía antes. Pero, quien no sabe, ni quiere saber, se ampara en argumentos de necios con claras muestras de ignorancia supina.

Imagen de gatos comunitarios de la colonia felina al lado del Colegio de Valdeluz

Una clara muestra de que los gatos están sanos.

La Asociación Quiéreme Mucho Valdeluz ya ha demostrado que los gatos comunitarios de las colonias de nuestro municipio no muestran signos de tener ninguna enfermedad. Avalados con certificado veterinario que así lo dice, junto con los documentos de las pruebas sanitarias que se han hecho los voluntarios y que muestran claramente que están exentos de cualquier infección. Teniendo en cuenta que los voluntarios están todos los días en contacto con los gatos, no hace falta más que usar el sentido común y sumar hechos.

Ha sido el colegio, actuando con tranquilidad y mesura, quien ha zanjado el tema notificando que Sanidad ha declarado que no hay peligro, por que no hay ningún caso de la enfermedad que se les atribuye a los gatos como causantes del contagio.

Las causas reales se desconocen, pueden ser por cualquier motivo y esperemos que no sea nada grave para los afectados. Pero lo obvio es que el rumor inicial, alimentado por quienes desde la ignorancia, el rencor y a saber que otros intereses espurios y ruines, ha quedado silenciado sin ningún atisbo de que vayan a rectificar públicamente, y en las mismas condiciones y circunstancias en las que propagaron sus incendiarias palabras. Al menos, una parte de ellos han tenido la elegancia y el saber estar de rectificar, cosa que les honra. Esperamos que desde el Ayuntamiento se dignen, como mínimo, en hacer su trabajo bien en el asunto de las colonias, que afortunadamente tienen gente voluntaria con ganas de trabajar para los animales y para los vecinos de nuestro municipio.